CAW Arquitectos y su proyecto construido 100% en MSD Cepillado
En la comuna de San Esteban, Región de Valparaíso, la oficina CAW Arquitectos fabricó en madera MSD Cepillada de ARAUCO Casa Alto San Francisco, que responde al encargo de crear una casa de fin de semana que fuera el lugar de encuentro para una familia numerosa, cuyos integrantes viven diseminados en departamentos pequeños en Santiago.
Se trata de un inmueble cuya flexibilidad de espacios resulta acogedora para ir solo o en grupo. “En ese sentido, se armaron dos pabellones, uno que es una gran nave donde está el living, el comedor y la cocina, todo junto, y en el otro se encuentran los dormitorios», comenta el arquitecto Rodrigo Werner. “La idea era hacer un refugio asociado siempre a un material más rústico y más acogedor… la madera se asocia a eso”, agrega.
Werner explica que la casa tiene la dualidad de que, en un lugar donde nieva en invierno, la vista da al sur, donde no llega sol. Aquello fue solucionado con ventanas grandes pero bajas hacia un lado, y bien altas al otro. Funciona, además, como una caja térmica: en verano donde la temperatura puede llegar hasta los 35° C, el refugio – alineado con el norte– es fresco, mientras que en invierno es cálido porque entra mucho sol. Lo otro interesante es que la casa tiene techo plano porque se aprovecha la nieve como aislante térmico. ¿Cómo resiste el peso? El refugio posee cerchas de madera elaboradas especialmente para tal fin.
“Éstas también funcionan como elemento disipador acústico para que no haya reverberación, (algo pensado) justamente para el uso de la familia, que son músicos. (En conjunto) la casa tiene una acústica súper rica para tocar porque la estructura misma (del refugio) se utilizó como elemento de tratamiento acústico”, destaca el arquitecto.
Un atributo adicional es que la construcción tiene una fachada exterior que no toca directamente la estructura, sino que está separada por aire, lo que implica que no se sobrecaliente en verano y que el aire desfile, “y eso se logra con la madera; o sea, si hubiese trabajado con otros materiales, igual hubiera puesto madera para lograr eso”, señala Rodrigo Werner, quien resalta que la eficiencia en el uso de la madera llegó a tal punto que todas las puertas de la casa se hicieron con los despuntes del MSD.
En cuanto al cuidado que requiere un refugio de madera, el arquitecto apunta a que una edificación construida a esa altura está mucho menos expuesta a la presencia de hongos y moho que conlleven a la pudrición de la madera, dado que es un clima más seco. Además, como esta casa no toca el suelo debido a los apoyos de cemento que la sostienen, tampoco está expuesta a la humedad.