ARAUCO apuesta por tecnología satelital para proteger la biodiversidad.

Corporativo
Publicado el 28-08-2024

 

  • En los últimos años, la compañía forestal se ha adherido a distintas empresas internacionales para desarrollar dispositivos que le permitan detectar a tiempo incendios forestales y, en esta ocasión, analizar detalladamente la biodiversidad.

 

En 2023, ARAUCO se contactó con la empresa alemana OroraTech, con quienes diseñaron una plataforma pionera en el mundo para detectar de manera temprana incendios forestales y alertar a los equipos para iniciar a tiempo su combate. Lo que no se sabía, es que en paralelo estaban trabajando de la mano del emprendedor Leo Prieto para lanzar a la órbita el primer nanosatélite de una empresa privada en estudiar la biodiversidad.

 

“Estamos cruzando la frontera de la innovación con un paso decisivo hacia la obtención de datos precisos y detallados sobre la biodiversidad de Chile y el mundo”, cuenta el gerente de personas y sostenibilidad de ARAUCO, Charles Kimber.

 

Este nanosatélite está diseñado para observar el planeta y cuenta con una cámara hiperespectral de alta definición optimizada para la observación de los ecosistemas de la tierra, permitiendo analizar la biodiversidad a nivel mundial y a una resolución 20 veces mayor que la actual.

 

Leo Prieto asegura que las imágenes satelitales son “la forma más eficiente de poder monitorear las 51 mil millones de hectáreas de nuestro planeta”, lo que lo convierte en una poderosa herramienta para el estudio y protección de la naturaleza.

 

Más allá de Kimber y Prieto, existe consenso a nivel transversal de que este tipo de proyectos son necesarios para reducir la brecha de datos de la naturaleza y así ayudar a frenar la crisis ambiental. “Esta es una gran oportunidad para las empresas y personas que quieren invertir en conservación y cuidado del medio ambiente o que hacen de este tema una parte importante de su cadena de valor”, explica el ejecutivo de ARAUCO.

 

¿Cómo funciona este diminuto pero importante aparato?

 

Tiene 30 cm de largo, 20 cm de alto y 10 cm de largo. Su tamaño es similar al de una caja de zapatos y la cámara hiperespectral que tiene en su interior mide 32 bandas espectrales entre 450 y 900 nanómetros, que le permiten capturar detalles que son imperceptibles al ojo humano.

 

Su creador dice que es un hito tecnológico sin precedentes en Chile y una de las razones es que es capaz de segmentar la cobertura del suelo y la vegetación con una precisión 20 veces mayor a la actual, logrando ver no sólo la composición de la biodiversidad, sino que también sus modificaciones o tendencias a medida a lo largo del tiempo.

 

¿Qué áreas observarán inicialmente?

 

Entre las primeras áreas que se observarán por el nanosatélite se encuentran los humedales andinos desde el altiplano hasta Tierra del Fuego, monitoreo de bosques submarinos de macroalgas a lo largo de la costa chilena, clasificación de cambios en el uso del suelo, identificación de especies vegetales clave e identificación de especies vegetales invasoras.

 

¿Qué oportunidades abre esto para el manejo forestal sustentable?

 

Kimber cuenta que muchas. El satélite de LEMU ofrece una visión integral y detallada del estado de los bosques, facilitando una gestión más informada y proactiva.

 

Entre las posibilidades que entrega se encuentra una vigilancia continua que ayudará a detectar cambios como deforestación, degradación o invasión de plagas con mayor rapidez; contar con mapas para la planificación de una gestión forestal más certera; monitorear cómo cambian los usos de suelo a lo largo del tiempo para generar un mayor equilibrio entre el desarrollo y la conservación; información para evaluar la salud general de los bosques y para restaurar áreas degradadas, entre muchas otras cosas.